Comencé mi andadura como juez en el año 1998 juzgando concursos provinciales en la Comunidad Valenciana donde resido. Tardé en decidirme en dar el salto para ser Juez Nacional: lo conseguí en 2009. Mientras, y desde principios de los años 90 en compañía de mi esposa Dolores-Fernández-Pacheco, pusimos en marcha nuestro gran proyecto canino: el afijo Laseles. Comenzamos criando Boxer y vivimos también una interesante experiencia criando durante algunos años Pastores Polacos de la Llanura. Pero, al final y desde 1992, nuestra gran pasión fue el Perro de Agua Español y en él donde centramos nuestros esfuerzos y mejores intenciones como criadores, expositores y yo también como juez.
Esta raza/pasión principal la he complementado con el seguimiento y estudio del resto de las razas españolas, aunque solamente he podido contar con algunos ejemplares de Podenco Ibicenco y una preciosa Podenca Andaluza “chica”. Mi empatía con el Podenco Ibicenco nace de haber tenido a mi alcance el contacto con el club de la raza y con quizás el mejor pie y labor de cría de los últimos años. También por haber disfrutado de su despliegue de facultades en el campo viéndoles cazar. Vivo en Valencia y, como es natural, sigo el Ratonero Valenciano y su evolución desde finales de los años 90, así como su progresión y presencia en certámenes de belleza en los últimos años gracias al trabajo de un nutrido grupo de entusiastas. Por último y durante los últimos años, también mantengo contacto y seguimiento especial con algunas otras razas autóctonas. El Perro de Pastor Garafiano, raza llena de rusticidad, nobleza y trabajo que, contra viento y marea, progresa a pesar de la barrera que la insularidad representa y a la que creo se debería abrir hueco por sus infinitas cualidades; el Pastor Mallorquín y el Xarnego Valenciano también forman parte de mi primera línea de trabajo. Disfruto igualmente con galgos, perdigueros, sabuesos, pachones, mastines y careas. Ineludibles, hermosos y nobles son nuestra esencia y la de los hombres de nuestra tierra.
En julio de 2014, la Real Sociedad Canina de España tuvo a bien reconocerme como Juez Internacional de Morfología. También soy Juez de Trabajo de Perro de Agua Español y Podenco Ibicenco. Centro mis esfuerzos en ser Juez de Razas Españolas, de las que me confieso enamorado y sobre las que investigo. Ahora la Real Sociedad Canina de España vuelve a confiar en mí y me brinda la oportunidad de participar en esta ocasión única para un amante de las razas españolas y en especial, del Perro de Agua Español, lo que agradezco de manera sincera y entusiasta.